jueves, 27 de septiembre de 2012

Romance del rescate de las Autonomías

La Mancha pide el rescate,
el rescate pide La Mancha.
Tierra humilde que pide
pues así, como si nada,
ochocientos milloncejos
de nuestras centrales arcas.
Ya lo hiciera Cataluña,
la sin par administrada,
la risueña Andalucía,
tierra bastante rojaza,
Valencia o incluso Murcia,
peperas hasta las trancas.
Más no lo llamen rescate,
que es palabra malhadada
que a los mercados excita
y a la Angela da cancha.
Es Fondo de liquidez
como la cosa se llama.
El que lo llame rescate
es felón, traidor, sociata,
un sucio conspirador
que negra tiene su alma.
Lo llamen rescate o fondo,
cable, capote o derrama,
óbolo, favor, refuerzo,
ayuda, limosna o dádiva,
tengan presente señores
una verdad meridiana:
rescatan a diecisiete
y dejan desamparadas
a decenas de millones.
que poco tienen o nada.
Si eso es saber de números,
crudo lo tienes España.




jueves, 8 de marzo de 2012

Aprobada la reforma laboral

Antes que lluevan los curros
verás volar a los burros.

miércoles, 7 de marzo de 2012

Actualidad cansina

Lo de la deuda autonómica
produce abulia atómica.
(A de Guindos y Montoro
no les hago yo de coro).
Me produce urticaria
las escuchas de Invercaria.
No me cambiarán la vida
las primarias de Florida.
La movida con la RAE
más bien floja me la trae.
Es un solemne tostón
la canción de Eurovisión.
Y qué queréis que os diga
de nuestra aburrida Liga.
La de "por mi hija ma-to"
produce hernia de hiato.
Ocupa sólo mi mente
mi vecina la de enfrente.

martes, 6 de marzo de 2012

El órdago de Mariano a Europa

El órdago de Mariano
con el déficit dichoso
parece más bien tramposo
y pactado de antemano.

jueves, 13 de octubre de 2011

Los verdes brotes

¿Qué fue de los verdes brotes
de la ministra Salgado?
Era el moho del mercado,
estimados muchachotes.

miércoles, 12 de octubre de 2011

Precampaña feliz

Érase una precampaña
respetuosa y gentil,
ingeniosa, constructiva...
el votante era feliz.
Había visión de Estado
si tocaba debatir,
al rival no se buscaba
el doblarle la cerviz.
Y Rubalcaba y Mariano
pugnaban en buena lid
sin insultos ni reproches,
sin trincherasm sin fusil,
sin frases envenenadas
ni arranques de jabalí.
Y hasta había consenso
para sacar al país
de esta crisis horrible
que tanto hace sufrir
a tantos españolitos
del uno al otro confín.
Y el resto de formaciones
de la sociedad civil
no buscaban ser bisagra
con la que poder urdir
suculentas alianzas
y con pactos cosenguir
apañar una poltrona
o un cargo de postín.
En suma, que los políticos
nos parecían por fin
gente tan sólo ocupada
en trabajar y servir.
De pronto abrí los ojos
cuando la alarma oí:
era que estaba soñando...
¡Ya me parecía a mí!

miércoles, 20 de octubre de 2010

Romance del nuevo Gobierno

El domingo, tras la siesta,
nuestro señor presidente
decidió que ya tocaba
retocar su gabinete.
"Y no lo hago, señores
por el decir de la gente",
ha aclarado Zetapé
en la radio y en la tele.
Y colocó Zapatero
como vicepresidente
al ministro Rubalcaba,
el de retorcido diente,
una nefasta noticia
para el partido de enfrente,
que sabe cómo las gasta
este taimado merengue.
Más su cargo en Interior
el señor Pérez mantiene,
y se canta el gorigori
por ETA y toda su gente
que ya los vemos a todos
en el Dueso y Martutene.
(Y hasta el propio José Bono
el rictus helado tiene).
Se nos va doña Teresa
tan delgada y tan valiente
se va al Consejo de Estado,
un cementerio viviente.
Se nos marcha Moratinos
ese lince del Oriente,
los asuntos exteriores
son para Trini Jiménez
porque siempre hay un hueco
para la Trini Jiménez.
Su puesto en la Sanidad
(que no se ría la gente)
se lo han encasquetado
a la Pajín, doña Leire,
que o pasaba por allí
o de verdad no se entiende.
El ministro de Trabajo
es un acierto solemne
pues tiene nombre de yerba
de esas con las que duermes
durante toda la noche
hasta el día siguiente,
que al llamarse Valeriano
se calma mucho la gente.
Sustituye a Celestino
que a las catalanas huestes
regresa como el que huye
de la mismísima peste.
Regresa Ramón Jauregui
un donostiarra prudente
para partirse la cara
con su verbo de docente
con todas las señorías
y sus mociones pendientes.
Lo hará bien don Ramón
porque es muy competente.
Para la Rosa Aguilar,
la cosa del Medio Ambiente
que como antigua rojeras
cual mano al guante le viene.
Y aquí termina el repaso
del flamante gabinete
del que salen disparadas
cual si fueran tres cohetes
Espinosa, la Aído
y Corredor. Pobre gente.
El resto sigue en su sitio
con alivio evidente
pues es perder la cartera
un monumental cachete.